Esta es Kim Kardashian tomando vino y enseñando las tetas con unas amigas en la playa.
El mayor disparate de nuestro tiempo es el culto a la amistad que se promociona en todas partes.
Yo siempre he creído más en el minimalismo social. El truco es muy sencillo, tus amigos son exactamente los miembros de tu familia que hay dentro de tu casa cuando cierras la puerta por la noche. Fuera de ahí tienes conocidos pero ninguno, y este punto es muy importante, debe creer tener la suficiente confianza contigo como para poder llamarte por teléfono, enviarte un email o involucrarte en temas personales. Ese es el verdadero secreto de la felicidad.
La gente normal, los que no practican el minimalismo social, suelen tener su vida llena de dramas provocados por la falta de higiene en sus relaciones personales y a la mínima oportunidad intentarán arrastrar a cualquiera que tengan a su al rededor hacia sus miserias. Son expertos en enviar emails o en hacer llamadas telefónicas de esas que convierten tu tranquila mañana de Miercoles en un desastre de proporciones difíciles de imaginar 5 minutos antes de que te llamasen.