Después de 80 años saliendo cada semana la revista Newsweek cierra hoy su edición en papel para dedicarse exclusivamente a su división online. Se despiden con un hashtag en su portada #LastPrintIssue.

Lamento que todo esto esté pasando porque además quiero creer que Twitter, la dictadura de la gente en Internet opinando acerca de cualquier cosa y haciendo presión en temas que desconocen, no es más que algo pasajero. La historia de internet nos ha demostrado que todo tiene un final, Twitter también se irá antes de lo que creemos. Poner ese hashtag en la portada del Newsweek, lo interpreto como una rendición a lo que alguien ha pensado que es el futuro. Esa portada, ese Hashtag es el chiste ocurrente de algún editor imbécil sin el más mínimo respeto por los 80 años que esa revista ha estado en la calle. 80 años de trabajo que quedan reducidos a el chiste de un idiota; a un guiño con fecha de caducidad y que pocos entenderán dentro de 30 años.

Si el futuro es lo que representa un #Hashtag: la masa de gente opinando, estamos todos muertos. La masa es estúpida, carente de talento y destructiva. La masa debe ser utilizada como una herramienta más y se le debe reconocer su labor en según que casos, pero jamás se debe tener en cuenta su opinión para temas que requieran un uso del sentido común, conocimientos específicos o un razonamiento lógico. La masa de gente en el 100% de los casos se mueve por sentimientos y nunca por la razón.

Estas palabras pueden herir la sensibilidad de algunos o incluso ser tachadas de mil cosas, pero sinceramente me da igual. Las cosas son como son y no van a cambiar por no querer herir la sensibilidad de la gente. Dejar de decir algunas cosas es lo que está destruyendo nuestra sociedad y sustituyéndola por una amalgama mediocre de conceptos, ideas y sentimientos egoístas de una masa de gente carente del más mínimo sentido de la realidad.